La terapia con anticuerpos monoclonales es el uso de anticuerpos monoclonales o mAb para dirigirse específicamente a las células.
El objetivo principal es estimular el sistema inmunitario del paciente para que ataque las células tumorales malignas y prevenir el crecimiento tumoral mediante el bloqueo de receptores celulares específicos.
Existen variaciones dentro de este tratamiento, egradioinmunoterapia, una dosis radioactiva directamente a la célula objetivo y dosis químicas letales al objetivo.
Estructura y función de los anticuerpos humanos y terapéuticos Los anticuerpos de inmunoglobulina G IgG son moléculas heterodiméricas grandes, de aproximadamente 150 kDa y están compuestas por dos tipos diferentes de cadena de polipéptidos, llamados cadena pesada ~ 50kDa y cadena ligera ~ 25kDa.
Hay dos tipos de cadenas ligeras, kappa κ y lambda λ.
Por escisión con enzima papaína, la parte Fab unión fragmento-antígeno puede separarse de la parte Fc fragmento cristalino de la molécula.
Los fragmentos Fab contienen los dominios variables, que consisten en tres dominios de aminoácidos hipervariables responsables de la especificidad del anticuerpo incrustada en regiones constantes.
Hay cuatro subclases de IgG conocidas, todas involucradas en la citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos.
El sistema inmunitario responde a los factores ambientales que encuentra sobre la base de la discriminación entre uno mismo y uno mismo.
Las células tumorales no están específicamente dirigidas por el sistema inmunitario porque las células tumorales son las células del paciente
Sin embargo, las células tumorales son muy anormales, y muchas muestran antígenos inusuales que son inapropiados para el tipo de célula, su entorno o que normalmente solo están presentes durante el desarrollo de los organismos por ejemplo, antígenos fetales.
Otras células tumorales muestran receptores de la superficie celular que son raros o ausentes en las superficies de las células sanas, y que son responsables de activar las vías de transducción de señales celulares que causan el crecimiento y la división no regulados de la célula tumoral.
Los ejemplos incluyen ErbB2, un receptor de la superficie celular constitutivamente activo que se produce a niveles anormalmente altos en la superficie de aproximadamente el 30% de las células tumorales de cáncer de mama.
Tal cáncer de seno se conoce como cáncer de seno HER2 positivo.
Los anticuerpos son un componente clave de la respuesta inmune adaptativa, desempeñando un papel central tanto en el reconocimiento de antígenos extraños como en la estimulación de una respuesta inmune a ellos.
La llegada de la tecnología de anticuerpos monoclonales ha permitido generar anticuerpos contra antígenos específicos presentados en las superficies de los tumores.